Uno de los activos más valiosos para asegurar la rentabilidad y continuidad operativa de las grandes/pequeñas empresas industriales es el óptimo funcionamiento de su maquinaria.
La detención por falta de mantenimiento o falla inesperada de alguno de sus equipos puede acarrear retrasos en el proceso de producción y graves consecuencias económicas, términos de contratos y pérdida de credibilidad en la industria.
Por ellos, desde Janssen, explicamos todo lo que debe tener en cuenta y la importancia de las mantenciones preventivas para el buen funcionamiento y rendimiento de sus grúas horquilla.
¿Qué es el mantenimiento preventivo?
Las mantenciones preventivas son un conjunto de acciones que tienen como objetivo conservar las condiciones óptimas de la maquinaria, anticipándose así a posibles daños o inconvenientes que puedan afectar su desempeño.
Están destinadas a la realización de reformas o modificaciones de componentes en el equipo, para prevenir averías potenciales y complicaciones futuras e imprevistas.
Son fundamentales porque alargan la vida útil de la máquina, minimizan las mantenciones correctivas, generan un ahorro en repuestos, a mediano y largo plazo, y garantizan los estándares necesarios de seguridad.
Existen tres tipos de mantenciones preventivas:
- Mantenimiento predictivo: aquel enfocado en evaluar el estado de los componentes del equipo, para determinar cuándo y cómo se deben realizar las mantenciones correspondientes.
- Mantenimiento operativo: el realizado al cumplir cierto objetivo o límite de funcionamiento del equipo. Por ejemplo, verificar el deterioro del aceite de la máquina según su uso.
- Mantenimiento de oportunidad: el que se lleva a cabo durante los períodos de inactividad del equipo. Por ejemplo, una inspección de motor antes de ponerlo en funcionamiento a modo verificar que todo esté en orden.
Realizar un mantenimiento preventivo oportuno, como parte de la rutina y procesos de la empresa, trae beneficios asociados a un óptimo performance, máxima eficiencia, al aumento de la disponibilidad y vida útil de los equipos, y al ahorro de costos.
Diferencias entre el mantenimiento preventivo y el mantenimiento operativo
De acuerdo con lo mencionado anteriormente, el mantenimiento preventivo se realiza de manera proactiva, para abordar los problemas antes de que sucedan, evitando así ineficiencias en los procesos y reparaciones inesperadas.
Por su parte, el mantenimiento operativo es un tipo de mantenimiento preventivo aplicado para prolongar la vida útil del equipo y maximizar su rendimiento. Incluye una serie de ajustes menores, limpieza e inspecciones, conforme a las características de la máquina.
En las mantenciones operativas, el propio operador suele realizar el mantenimiento durante el curso normal de las operaciones. Si bien las reparaciones importantes están a cargo de técnicos especializados, el capacitar a los operadores para realizar estos controles ayuda a las empresas a reducir el tiempo de inactividad y los costos asociados con reparaciones y piezas de repuesto.
Al inspeccionar la máquina, el operador puede detectar un peligro potencial que desencadenaría un accidente mayor. Dicha inspección también comprende la limpieza básica de la máquina, incluida la eliminación de escombros o exceso de grasa del equipo.
Dependiendo del tipo de equipo en uso, los operadores también pueden ser responsables de reemplazar filtros desgastados, quitar y reemplazar partes o mantener la lubricación correcta de los componentes para reducir el riesgo de fricción.
El mantenimiento operativo no incluye reparaciones ni diagnósticos complejos, por lo que la mayoría de las fallas eléctricas, por ejemplo, se dejan en manos de técnicos capacitados y no del operador. La remoción y reemplazo de componentes grandes o peligrosos también están excluidos del mantenimiento operativo.
Mantenimiento de grúas horquillas: ¿qué es y cuándo hacerlo?
El mantenimiento de grúas horquillas es esencial, ya que se trata de bienes de capital con un rol clave en el trabajo diario de centros de distribución, bodegas y galpones industriales.
Es un factor fundamental que forma parte de las estrategias de gestión de las empresas, principalmente, por el alto impacto que tiene en su eficiencia y niveles de productividad.
Algunos de los beneficios que reportan las políticas de mantenimiento de grúas horquillas son capacidad de producción, calidad, seguridad y rentabilidad.
Para determinar el tipo de revisión y control que debe aplicarse a las grúas horquillas, criterios como la cantidad de horas trabajadas o días calendario y el tipo de trabajo que realiza son los más utilizados. Esto porque, incluso cuando la máquina está detenida igualmente se produce deterioro en algunos elementos, como el aceite, por ejemplo.
También, es necesario considerar factores como el lugar de operación del equipo respecto al tipo de suelo y nivel de contaminación al que estará expuesto, de manera que se puedan estimar/proyectar costos de gastos por reemplazo de piezas, intervalos de mantención, reparaciones en el sistema de frenado, etcétera.
Entre las recomendaciones generales referidas a cuándo es el momento adecuado para realizar el mantenimiento de una grúa horquilla, esto es lo que se debe tener presente:
Plazo indicado por el fabricante
Se deben cumplir los tiempos sugeridos para cambios de repuestos o componentes, en el tiempo cabal y con la frecuencia sugerida por en los documentos oficiales, manuales o instructivos de la máquina proporcionados por el fabricante del equipo.
Condiciones en las que trabaja la máquina y su demanda
Si las condiciones donde trabaja el equipo no son las óptimas (ya sea por temperatura, terreno, etcétera) y los cambios en la producción de los proyectos se intensifican, aumentando su frecuencia de uso, las mantenciones del equipo deberán ser más específicas y en períodos más cortos, para garantizar su performance.
Cambios de comportamiento
O la identificación de situaciones inusuales, como por ejemplo si el equipo comienza a requerir más tiempo de actividad para completar determinada maniobra o si se observa cualquier baja en su rendimiento.
Consejos para el mantenimiento de las grúas horquillas
- Las tareas de mantenimiento que impliquen una intervención del equipo, solo pueden ser realizadas por personal competente y debidamente acreditado, es decir, que cuenten con capacitación del fabricante o una capacitación interna debidamente aprobada.
- En la reparación de elementos críticos, tales como sistemas hidráulicos, eléctricos, transmisión, motor y estructura, se debe utilizar únicamente piezas originales o alternativas autorizadas por el fabricante o certificadas por una autoridad competente, y que dichas piezas sean auditables y trazables.
- No se deben realizar alteraciones ni, especialmente, adiciones o transformaciones en el equipo, sin un control de cambio debidamente autorizado por el encargado de mantenimiento.
- Al cambiar los neumáticos, se deben utilizar para el reemplazo solamente aquellos que hayan sido homologados por el fabricante.
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En Janssen, contamos con una amplia selección grúas horquilla, adaptadas a las demandas de proyecto y necesidades de nuestros clientes.
Adicionalmente, ofrecemos un servicio de mantenciones preventivas en el que nuestros técnicos expertos les proporcionarán una evaluación de riesgos, oportunidades de mejora y recomendaciones útiles para el buen funcionamiento y seguridad de su equipo.
Toda nuestra maquinaria está certificada por profesionales altamente calificados. Esto con el objetivo de garantizar su óptima funcionalidad en trabajos de gran exigencia y afianzar la fiabilidad productiva que buscan nuestros clientes para su negocio.
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